Los músculos de los hombres pueden ser más grandes que los de las mujeres, pero cuando se trata de empujar un objeto los músculos masculinos se debilitan mucho más rápido, demostró una investigación.
Cuando los investigadores de la Universidad de Colorado en Boulder probaron la resistencia muscular entre 16 participantes del estudio, encontraron que las mujeres aguantaban más que los hombres. Hombres y mujeres tuvieron que realizar dos tipos de ejercicios para probar los músculos flexores del codo: uno consistía en mantener un brazo en posición rígida por el mayor tiempo posible, y en otro, se agregó una bolsa con peso en la muñeca.
El equipo de Hunter encontró que aunque los hombres eran más fuertes, las mujeres podían sostener cerca de 75 por ciento de más tiempo las contracciones musculares. De hecho, dijo Hunter, un "muchacho alto y corpulento" aguantó las posiciones sólo por tres minutos, mientras que una mujer lo soportó durante hora y media. La investigadora presentó los hallazgos, en un encuentro de la American Physiological Society.
Investigaciones previas han obtenido resultados similares para diversos grupos de músculos, pero las razones de la mayor resistencia de las mujeres todavía no están claras. Para abundar sobre el asunto, el equipo de Hunter cuantificó la actividad eléctrica en los músculos de los participantes mientras realizaban los ejercicios. Al parecer, no se observan diferencias en la actividad del sistema nervioso central de los hombres y las mujeres. En cambio, dijo Hunter, las mujeres pueden tener mejor flujo sanguíneo en los músculos, haciéndolas más proclives al rápido cansancio.
Otros hallazgos del estudio esgrimen esta teoría: la presión sanguínea de las mujeres y la frecuencia cardíaca fue inferior que la de los hombres durante el ejercicio. Debido a que los estrógenos promueven el flujo de sangre, dijo Hunter, las diferencias hormonales podrían explicar la distinta resistencia entre hombres y mujeres. Los estudios también han mostrado que las mujeres tienen mayor resistencia que los hombres durante el ejercicio aeróbico. De nuevo, agregó Hunter, los estrógenos podrían marcar la diferencia. La hormona parece ayudar al cuerpo a conservar los carbohidratos, de modo tal que las mujeres tienen más energía para llegar al final del juego.
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